Al pésimo momento que vive San Lorenzo, con la gente pidiendo elecciones anticipadas ante la crisis institucional y deportiva que se agita con el fantasma del descenso, la situación pasó a tener como principal foco durante las últimas horas el hecho de saber hasta dónde se va a tensar la soga con Ricardo Centurión.
El plantel azulgrana se entrenó después de la derrota contra Patronato y allí, en la Ciudad Deportiva, luego de haber jugado los segundos 45 minutos, Ricky no apareció. Brilló por su ausencia una vez más. Así las cosas, ya son cuatro los días que no cumple con su trabajo durante las últimas dos semanas.
Los problemas arrancaron en la previa del partido contra Racing de Córdoba, donde faltó por partida doble, y Troglio lo sacó del 11 titular que jugó en San Luis. Siguió el domingo pasado con un faltazo tras el empate con Platense. Ese mismo día, el club dio una versión distinta informando que no estuvo en el Bajo Flores por un cuadro lumbar. Hoy, oficialmente, desde Boedo no dijeron nada.
Por lo pronto, con Centurión nuevamente ausente de los entrenamientos, habrá que ver la decisión que toma la dirigencia, que estaría evaluando sancionar al jugador y hasta considerando la rescisión de su contrato una vez que termine este torneo. Su préstamo con Vélez vence a final de año y si San Lorenzo lo quiere debería pagar dos millones de dólares por el 50% de su ficha.
Con este nuevo acto de indisciplina, por cómo viene la mano es probable que Fernando Berón no lo tenga en cuenta para el partido contra Newell’s, el próximo miércoles desde las 20.30 en Rosario. Por el momento solo resta esperar…