Ya afuera de la pelea por el torneo, Rubén Insúa guardó futbolistas contra Belgrano pensando en el encuentro de vuelta ante el DIM, en el Pedro Bidegain, del próximo miércoles. Con la esencia de su San Lorenzo intacta, el DT le dio rodaje a varios jugadores de recambio que no venían sumando minutos y ,entre ellos, se destacó el debut de un juvenil: el colombiano Diego Perea.
El delantero de 20 años jugó los 90 minutos en el Gigante de Alberdi y cumplió una buena labor, haciendo el trabajo que habitualmente realiza Adam Bareiro. En eso de aguantar la pelota se hizo fuerte en la primera mitad. Y si bien en el complemento no gravitó estando con uno menos, se suma como una alternativa más que viable en el ataque azulgrana pensando en lo que viene.
Perea vino a probarse a principios del 2020 al Ciclón, justo al mismo tiempo que su compatriota Mateo Paniagua, el hermano de Juanfer Quintero que finalmente dejó el fútbol y se dedicó a la música, e inmediatamente fue fichado. Lo curioso es que empezó jugando en Cuarta y apenas pisó la Reserva, porque solo jugó un partido frente a Godoy Cruz antes de dar el salto a Primera.
Una vez finalizado el campeonato pasado, Insúa lo probó junto a varios juveniles para ver si podía formar parte del plantel de este 2023. Y lo convenció. Tal es así que lo llevó a la pretemporada en Uruguay, firmó su primer contrato profesional hasta diciembre del 2024 y antes de jugar en Córdoba ya tuvo la chance de mostrarse un tiempo en el amistoso frente a Peñarol.
Tercer debut del segundo ciclo de Insúa
Diego Perea se convirtió en el tercer jugador formado en las inferiores del club en debutar durante este segundo ciclo de Rubén Darío Insúa al frente de San Lorenzo. El primero fue Matías Hernández, que ingresó sobre el final del partido ante Lanús en la fecha 21 del torneo pasado (el 24 de septiembre) y el segundo Elián Irala, en la primera jornada de este campeonato contra Arsenal (28 de enero).
