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San Lorenzo se quedó y terminó empatando con Huracán

El Ciclón lo ganaba con gol de Di Santo en la primera mitad, pero se quedó en el complemento y Cristaldo, de cabeza, le dio cifras definitivas al marcador. Fue 1-1 en el Nuevo Gasómetro, con otra actuación floja del equipo de Dabove.

Un empate que no sirve para nada. Y menos por cómo se dio el partido. Superior San Lorenzo en en la primera mitad, pero la ventaja que consiguió por Di Santo no supo cómo aprovecharla. Porque increíblemente se replegó en los segundos 45 minutos y tras el 1-1 de Huracán jamás logró inquietar. En definitiva, otra actuación que preocupa de cara al cruce que se viene con la U de Chile por la Copa Libertadores.

Parejos primeros 45 minutos. Fue superior a San Lorenzo en el área rival, porque le sacudió el arco a Meza. Una, dos y hasta tres veces. Primero fue Nicolás Fernández, luego Ramírez al travesaño, por último otra vez Uvita. Huracán, en esa etapa, la tuvo más. Y en esa famosa diferencia entre tenerla y entretenerla, solo llegó con algo de peligro cuando Silva quiso definir por encima de Devecchi.

En medio de un un clásico intenso, la diferencia llegó en una contra letal que fue toda de Di Santo. Sí, el siempre cuestionado delantero primero despejó un córner en el área, después aprovechó un horror de Lozano en la mitad de la cancha, más tarde dejó al arquero en el camino con una gambeta larga en carrera y definió de zurda con la red a su merced. ¡95 metros recorrió! Go-la-zo.

san lorenzo de almagro angel romero
Angel Romero, durante el clásico frente al Globo.

Paradójicamente, el gol terminó siendo letal para San Lorenzo. Letal porque en el complemento Dabove eligió replegarse, buscar la contra y se quedó. Demasiado. Si bien tuvo un tiro libre de Angel que pasó cerca del ángulo, los de Damonte se adelantaron, empezaron a dominar y cuando parecía que no podía empatarlo, Cristaldo madrugó a todos de palomita (en el área chica) e igualó el marcador.

A partir de ahí, sintió el golpe y le costó reaccionar. La respuesta del DT fue mover el banco: metió a Oscar por Uvita, a Elías por el debutante Gordillo, a Julián Palacios por Ramírez y a Melano por Di Santo. Pero le pesó tener que ir a buscar. Y casi ya no tuvo posibilidades de empatarlo. Las que sí había tenido en el primer tiempo. Pobre, otra vez, lo del Ciclón.