Después de tanto revuelo, declaraciones cruzadas y opiniones divididas entre los hinchas, Mariano Soso decidió levantarle la sanción a Angel Romero y, por eso, el delantero volvió a entrenarse a la par del plantel luego de haberse perdido cinco prácticas, en las que trabajó al margen del grupo. En solitario. Castigado.
El problema que se generó con el melli ya es de público conocimiento. El viernes pasado le entró fuerte en un reducido a Andrés Herrera y los estudios determinaron que lo lesionó feo. Fue una fractura infrasindesmal del peroné izquierdo que le demandará una recuperación aproximada de tres meses al Yacaré. Justo cuando todo estaba dado para que sea transferido en este mercado al Palmeiras de Brasil.
Pero después de varios días revolucionados, la calma parece haber llegado. Ayer, en una charla con el jugador, Soso le prometió una amnistía y cumplió. Lo que ahora deberá resolver es si Angel, tras las ausencias, tendrá o no participación en el amistoso que está pautado para mañana frente a Argentinos Juniors, desde las 9.30 en el Nuevo Gasómetro.
Por lo pronto, quienes casi con seguridad no podrán jugar contra el Bicho son su hermano Oscar, con una sobrecarga en el isquiotibial, y Fabricio Coloccini, quien desde la semana pasada practica al margen por una molestia muscular y fue protagonista (in)voluntario después del polémico mensaje que escribió en las redes horas después de confirmarse la lesión de Herrera.
