En medio de un receso marcado por la salida de varios referentes, la reestructuración del plantel y las gestiones para levantar las inhibiciones, San Lorenzo cerró su primer refuerzo. Se trata de Leandro Allende, lateral-volante izquierdo proveniente de Quilmes, quien peleará por el puesto que quedó vacante tras la venta de Malcom Braida a Boca.
En las últimas horas, el club de Boedo llegó a un acuerdo con Quilmes para comprar su pase, descartando la posibilidad de sumarlo a préstamo. Aunque su contrato con el Cervecero finalizaba en diciembre, San Lorenzo pagará un resarcimiento que rondaría los 90 millones de pesos para asegurarse su incorporación.
Allende, de 28 años, puede desempeñarse como lateral o como volante por la izquierda, y llega para pelear el puesto con el juvenil Elías Báez y Teo Rodríguez Pagano, quien actualmente se encuentra con molestias físicas y será baja en distintos tramos del semestre por su convocatoria al Mundial Sub-20 que se jugará en Chile a fines de septiembre.
El defensor entrerriano inició su carrera en Defensores de Pronunciamiento, donde disputó el Torneo Federal A. En 2021 pasó a Chaco For Ever, con el que logró el ascenso a la Primera Nacional, y en 2024 recaló en Quilmes, donde fue titular indiscutido durante el último semestre: jugó 19 partidos oficiales, incluyendo la Copa Argentina.
Aunque el acuerdo ya está cerrado, Allende recién podrá ser habilitado si el club levanta las seis inhibiciones vigentes, que le impiden incorporar futbolistas. Mientras tanto, a falta de la firma de los papeles, el primer refuerzo del ciclo de Damián Ayude ya tiene todo listo para sumarse y quedar a disposición.