Cuando la salida de Adolfo Gaich empezaba a concretarse, después terminó yéndose al CSKA de Moscú, arrancaron las especulaciones por la llegada de un delantero para cubrir su baja. Claro está, había algunas dudas sobre cómo juveniles de la talla de Alexander Díaz o Peralta Bauer podían responder y, sumado a la lesión de Uvita Fernández, eso generó la búsqueda de un reemplazante.
En ese contexto, a falta de uno, llegaron dos atacantes en San Lorenzo: Franco Di Santo y Jonathan Herrera. El primero de dilatada trayectoria en Europa y pasado en la Selección Argentina. El segundo, con mayor consenso entre los hinchas de acuerdo a la encuesta de Vamos Ciclón, venía de pelearla durante casi toda su carrera en el Ascenso, siendo goleador de cada una de las categorías en las que jugó (récord en el fútbol argentino), y con la gran oportunidad de mostrarse después de un buen paso en la máxima categoría con Central Córdoba (SdE). Sin embargo, la estadía de éste último en Boedo parece que durará mucho menos de lo esperado.
El punta de 28 años llegó a préstamo desde Deportivo Riestra hasta mediados del año que viene pero lejos de tener protagonismo, se le hizo cuesta arriba y es probable que rescinda su contrato por estos días. ¿Cuáles fueron sus mínimas participaciones? Ingresar como suplente en el debut de la Copa Maradona ante Argentinos por 20 minutos, 2′ contra Estudiantes en el Nuevo Gasómetro, 18′ en la goleada con Aldosivi y 10′ contra el Pincha en La Plata. Después o no entró desde el banco o directamente se quedó afuera de los concentrados.
En esto también incidieron una serie de problemas que fueron retrasando su adaptación al club. Ya sus primeras semanas fueron algo complicadas. A días de haber arrancado los entrenamientos en Ezeiza tuvo que aislarse por el positivo de coronavirus de su esposa y una vez recuperado, volvió a quedar en cuarentena porque él se infectó del virus. Después de perderse cerca de un mes de prácticas, el aspecto físico le jugó una mala pasada.
Por algunas semanas entrenó diferenciado por una contractura en el gemelo izquierdo que le impidió llegar al 100% para el debut con Argentinos. Recuperado totalmente, Soso estaba decidido a incluirlo de titular contra Aldosivi por la citación de Angel y Oscar Romero a la primera fecha de Eliminatorias, pero a último momento se inclinó por el juvenil Peralta Bauer. Luego, en la previa al partido con Talleres, llegaría una contractura en el cuádriceps derecho que hasta hoy le impide entrenarse con normalidad.
En este panorama, la continuidad de Herrera en San Lorenzo pende de un hilo. Por su escasa participación en el equipo, su representante maneja algunas propuestas del exterior y la decisión está en sus manos: si quiere irse, la dirigencia no le pondrá reparos a su salida. “Soy conocido en el Ascenso por ser goleador en todas las categorías“, sacó chapa poco después de llegar al club, aunque, al parecer, no tenga la posibilidad de festejar ni un solo gol suyo en Boedo.